Introducción:
Salmo 105:17-22
“Envió un varón delante de ellos; a José, que fue vendido por siervo. Afligieron sus pies con grillos; en cárcel fue puesta su persona. Hasta la hora que se cumplió su palabra, el dicho de Jehová le probó. Envió el rey, y le soltó; el señor de los pueblos, y le dejó ir libre lo puso por señor de su casa, y por gobernador de todas sus posesiones, para que reprimiera a sus grandes como él quisiese, y a sus ancianos enseñara sabiduría a las autoridades del rey”.
1. El enviado tiene una Misión antes de conocerla.
Génesis 45:5
V. 5. “Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros”.
V.7. “Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación”.
V.8 “Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto”.
2. El enviado pasa por un proceso de renuncia, dolor y pérdida.
Génesis 37:
V. 23. “Sucedió, pues, que cuando llegó José a sus hermanos, ellos quitaron a José su túnica, la túnica de colores que tenía sobre si”.
V.24. “y le tomaron y le echaron en la cisterna; pero la cisterna estaba vacía, no había en ella agua”.
V. 28. “Y cuando pasaban los madianitas mercaderes, sacaron ellos a José de la cisterna, y le trajeron arriba, y le vendieron a los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto”.
José fue privado de bienes preciosos, tuvo que renunciar forzosamente.
ü Padre
ü Familia
ü Hogar
ü Seguridad
ü Comodidad
ü Probables amigos
ü Ventaja como hijo preferido
ü Libertad
ü Futuro
“A un hombre se lo puede evaluar por la medida de lo que se necesita hacer para desalentarlo”.
Robert C. Savage
3. El enviado pasa por un proceso de prueba de valores.
Génesis 39:7-10
V. 7. “Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo”.
V. 9. “[…] ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?
V. 10. “Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella”
V. 11. “Aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí”.
V. 12. “Y ella lo asió por su ropa, diciendo: Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió”.
“La lealtad a los valores aun cuando representa sufrimiento es un estimulante poderoso en la formación del carácter” (John Ortberg, Venha Andar Sobre as Águas, p. 125).
4. El enviado se interesa por el bienestar del prójimo.
Génesis 40: 6 y 7
V.6. “Vino a ellos José por la mañana, y los miró, y he aquí que estaban tristes”.
V. 7. “Y él preguntó a aquellos oficiales de Faraón, que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué parecen hoy mal vuestros semblantes?
“Los cristianos que manifiestan entre sí un espíritu de amor abnegado están dando un testimonio por Cristo que los incrédulos no pueden negar ni resistir” (Mente, carácter y personalidad, t. 1, p. 246).
“Si el amor de Cristo mora en nosotros, no sólo no abrigaremos odio alguno hacia nuestros semejantes, sino que trataremos de manifestarles nuestro amor de toda manera posible” (ibíd., p. 255).
Los tres secretos del éxito:
“El éxito no depende tanto del talento como de la energía y de la buena voluntad. No es la posesión de talentos magníficos lo que nos habilita para prestar un servicio aceptable, sino el cumplimiento concienzudo de los deberes diarios, el espíritu contento, el interés sincero y sin afectación por el bienestar de los demás” (El colportor evangélico, p. 79).
· Realizar a conciencia los deberes diarios
· Tener un espíritu de satisfacción
· Demostrar interés sincero en el bienestar de otros
5. El enviado es reconocido como un hombre o una mujer de Dios
Génesis 41: 38.
“[…] ¿Acaso hallaremos a otro hombre como éste, en quien esté el espíritu de Dios?”
Evidencias de José como hombre de Dios.
· Su buena reputación.
· Su buena apariencia.
· Sus palabras de consejo
¿Cuánto valdría el consejo de José si se pudiera evaluar en dinero?
El consejo de José sobre administración y economía hizo de Egipto el país más poderoso del mundo y de Faraón el hombre más rico del mundo.
Como consecuencia de la intensificación de la sequía los propietarios de tierras vendían sus propiedades a cambio de alimentos y José compró toda la tierra de Egipto para Faraón.
En cierto sentido un Colportor Evangélico es como José pero con una diferencia crucial.
Mientras el consejo de José resultó en preservar la vida aquí en la Tierra, el consejo del Colportor puede resultar en preservar la vida en la eternidad.
Mientras el consejo de José resultó en riqueza para Egipto y Faraón, el consejo del Colportor resultará en el mayor de todos los tesoros: ¡La Salvación!
6. El enviado sabe perdonar
Génesis 45:5
V.5. “Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros”.
Es imposible ser usado totalmente por Dios en una misión sin que primero aprender a perdonar.
7. El enviado tiene visión de eternidad
Génesis 50: 25 y 26.
V. 25. “E hizo jurar José a los hijos de Israel, diciendo: Dios ciertamente os visitará, y haréis llevar de aquí mis huesos.
V. 26. “Y murió José a la edad de ciento diez años; y lo embalsamaron, y fue puesto en un ataúd en Egipto.
La Visión de José
“A través de los siglos de trabajo que siguieron, aquel ataúd, recuerdo de las postreras palabras de José, daba testimonio a Israel de que ellos eran sólo peregrinos en Egipto, y les ordenaba que cifraran sus esperanzas en la tierra prometida, pues el tiempo de la liberación llegaría con toda seguridad” (Patriarcas y profetas, p. 245).
José sobrevivió a su padre 54 años. Vivió hasta ver a los nietos y bisnietos.
Fue testigo del aumento y la prosperidad de su pueblo.
A lo largo de los años permaneció inamovible en la fe de que Dios restauraría a Israel a la tierra prometida.
Aunque próspero y exitoso, José entendía que era forastero en tierra extraña. Su corazón anhelaba la tierra prometida.
¿Estamos deseando el hogar que Dios nos está preparando?
¿Alguna cosa puede atarnos aquí?
¿Son el éxito y la prosperidad trampas que nos retienen aquí?
José tenía una visión espiritual de la tierra prometida porque creía en la Palabra de Dios dada a sus antepasados.
Creer en la Palabra de Dios nos mantiene en la dirección correcta, en la visión más excelente, en el camino a la eternidad.
“Todo lo que no es eterno es eternamente inútil” (C.S. Lewis).
CONCLUSIÓN
Así como José fue enviado para salvar antes que él supiese de ese propósito divino, Dios tiene un plan semejante para muchos hermanos y hermanas.
Para los que sienten la responsabilidad por la salvación de las personas.
Para los que comprenden el desafío de la predicación del último mensaje de advertencia al mundo.
Para los que desean ser dirigidos por Dios a una obra mayor que cualquier actividad temporal.
Dios tiene un llamado especial:
“Tanto jóvenes como mayores serán llamados del campo, del viñedo y del taller, y enviados por el Maestro para dar el mensaje […]” (El colportor evangélico, p. 22).
“Dios llama a obreros de todas las iglesias para que entren en su servicio como colportores evangélicos” (ibíd., p. 21).
Si el Espíritu Santo está tocando su corazón para ser un mensajero de esperanza, no se detenga, ofrézcase en el altar del servicio.
Pr. Almir Marroni
Director de Publicaciones de la DSA